Sistema de adelgazamiento ShockWave - Ref.: 1387

El equipo utiliza tecnología de choque térmico en la que los tratamientos de crioterapia (frío) son seguidos por tratamientos de hipertermia (calor) de forma dinámica, secuencial y con temperatura controlada. La crioterapia hiperestimula la piel y el tejido, acelerando considerablemente toda la actividad celular, y ha demostrado ser muy eficaz en el adelgazamiento y la escultura corporal. Las células grasas (en comparación con otros tipos de tejido) son más vulnerables a los efectos de la terapia de frío, que causa la apoptosis de las células grasas, una muerte celular controlada natural. Esto conduce a la liberación de citocinas y otros mediadores inflamatorios que eliminan gradualmente las células grasas afectadas, reduciendo el grosor de la capa de grasa, las células se destruyen y se eliminan naturalmente a través del sistema linfático. Los clientes en realidad están eliminando células grasas, no solo perdiendo peso. Cuando se pierde peso, las células grasas disminuyen de tamaño, pero permanecen en el cuerpo con el potencial de aumentar de tamaño.

Terapia de ondas de choque

La terapia de ondas de choque en este dispositivo se genera mediante una fuente electromagnética. La energía electromagnética crea un movimiento balístico a través del aplicador. Las ondas de choque transmiten intensas ondas de choque mecánicas al tejido, aumentando la circulación sanguínea y estimulando la formación de fibras de colágeno. Esto influye positivamente en la estructura del colágeno de la piel y el tejido conectivo, lo que mejora la apariencia de la celulitis. Las ondas acústicas de alta energía provocan la caída de las burbujas de gas dentro de las estructuras grasas (cavitación) y las desestabilizan. La terapia de ondas de choque produce resultados positivos prácticamente inmediatos, incluso después de una sola sesión.

Aplicador incorporado con sistema de enfriamiento, que puede soportar un tratamiento duradero sin problemas de sobrecalentamiento, esta característica única asegura una larga vida útil del aplicador.